Nuevo showroom!

En ocasiones, solamente incluyendo un color que destaca por sí solo, de una manera natural y agradable visualmente, se crea un ambiente diferente y único. Dependiendo del color elegido, puedes resaltar o suavizar el espacio.

En este proyecto, el cliente nos propuso que su nueva
imagen de marca quedara integrada en el diseño del showroom. Habían hecho un trabajo de branding en el que los colores que les representaban eran color
crema, antracita y un tono naranja potente. Por tanto, el color era un elemento clave a tener en cuenta en el interiorismo.

Uno de los retos fue encontrar el equilibrio entre la
aplicación de los colores de marca con su producto cerámico. Los lugares elegidos en los que se utilizó su color fueron las zonas sociales, como, por ejemplo, las estructuras que componen la mesa de recepción y la celosía de la zona de espera.

Para compensar el peso de ese color, se utilizó una
cerámica de tonos claros en el pavimento. Es un estilo diferente al habitual con el que conseguimos una propuesta que enamoró al cliente.

¿Os atreveríais con una propuesta tan rompedora?